Desde muy jóvenes, las mujeres deben aprender a cuidar de su salud. Adoptar medidas de prevención sencillas te permitirá mantener unos buenos niveles de salud, evitar algunas enfermedades y descubrir problemas de salud en fases iniciales.
Visita a tu ginecólogo una vez al año para una revisión ginecológica general.
Prevención de enfermedades de transmisión sexual
Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) son infecciones que se contagian de una persona a otra usualmente durante el sexo vaginal, anal u oral. Son muy comunes y en la mayoría de los casos, asintomáticas. Las ETS tienen efectos directos en la salud sexual y reproductiva ya que pueden ser causa de infertilidad, cáncer y complicaciones en el embarazo.
El mejor modo para protegerte contra las ETS es el uso de preservativo durante las relaciones sexuales.
Evitar embarazos no deseados
Utiliza un método anticonceptivo. Elige el que mejor se adapte a tus necesidades: preservativo, hormonas anticonceptivas (en forma de pastillas, parches, anillos o implantes) y dispositivo intrauterino (DIU).
Prevención del cáncer de mama
El cáncer de mama es frecuente, pero si se diagnostica precozmente responde mejor al tratamiento. Actualmente la mayoría de los cánceres de mama se curan. En algunos casos es hereditario, por lo que es importante que informes a tu médico si tu madre y/o hermanas han tenido cáncer de mama.
Realizarte el autoexamen de mamas también es una excelente forma de prevención.
Prevención del cáncer de cuello uterino
Desde que se inician las relaciones sexuales, o si no hay contactos sexuales a partir de los 20 años, las mujeres deben hacerse una citología vaginal (prueba de Papanicolaou).
Durante esta prueba, el médico recolectará células de la vagina y el cuello uterino, para analizarlas en busca de características que permiten detectar cáncer o incluso células precancerosas.
Las mujeres que han tenido relaciones sexuales desde muy jóvenes o con muchas parejas diferentes tienen mayor riesgo de cáncer de cuello uterino, por lo que deben hacerse controles más frecuentes.
Es recomendable la administración de la vacuna del virus del papiloma humano (VPH) a las niñas con 12 años. Se administra sobre todo para prevenir el cáncer de cuello de útero, pero también de vulva, ano, vagina y orofaringe causado por el VPH. Actualmente se sabe que protege contra las lesiones premalignas (verrugas genitales, etc.) de cuello uterino en las niñas adolescentes y las mujeres jóvenes de 15 a 26 años.
Fuente: OMS. Infecciones de transmisión sexual. https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/sexually-transmitted-infections-(stis); Guía Práctica de salud SemFyC. https://www.semfyc.es/wp-content/uploads/2021/12/19_1.pdf